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QueSiQuieresArrozCatalina

Sólo por seguir

 

 

 

Cuando pasen muchos, muchos años;

un día que podría ser cualquiera,

encontraré

debajo de una baldosa que no parecía estar hueca

un par de doblones de oro.

 

Ese es todo el recuerdo que me quedará

cuando las avenidas se conviertan en ríos de nuevo:

Dos doblones de oro,

sucios.

 

No, sucios no, desgastados.

No, desgastados no, viejos.

Vendrán conmigo y no los cambiaré nunca.

Los guardaré en mi mano aunque ya no sean relucientes.

Ellos sabrán lo mucho que cuesta.

Vivirán lo que yo viva: experiencia y tiempo.

Pasarán frío.

Perderán la batalla

y heredarán mi miedo a los naufragios,

pero no estarán solos.

 

Esto debéis saberlo.

No estaréis solos.

Nadie robará lo que no es suyo.

Nadie os llevará consigo.

No pasaréis otro frío.

No perderéis otra batalla

No heredaréis otros miedos.

Sabed que nada de esto sucederá,

no, mientras yo vigile.

 

 

 

 

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