NO SE CREA...HACER UN HUEVO FRITO NO ES TAN FÁCIL.
Supongo que la esperanza existe
en base a lo contrario,
como todo,
pero este caso es especial:
requiere mirar con frecuencia
debajo de la cama;
localizar a los centinelas
y a sus lanzas de hierro forjado;
hay que sacarlos de sus casillas,
burlarse de su cometido,
desafiar a su presencia
y a sus ridículos cascos,
abofetearlos
y retarlos a duelo,
pero no sin antes haber
pasado el tiempo suficiente
intentando resolver
el acertijo que está escrito
en la insignia de la puerta.
3 comentarios
restituta -
Mia:si que reclamo un poco la infancia,joer...,las pillas todas.A ver si celebramos el final de los putos exámenes,Fiiiieessstaaaaa!!!!
La pequeña Mia dice: -
No sé por qué me recordó a "Pequeñas angustias infantiles" de Ana Merino.
Si te contara...ay...menudo fin de semana.
big -